Navegando en la terapia psicológica: ¿Cuánto tiempo dura una sesión psicológica y cuál es la duración de todo el proceso?
Cuando se inicia un proceso terapéutico o sesión psicológica, es normal tener preguntas, como por ejemplo cuánto dura una terapia psicológica y sus posibles resultados. En este artículo te contamos todo lo que necesitas saber, incluyendo la duración recomendable del tratamiento en sí.
¿Cuánto dura una sesión psicológica o sesión de terapia psicológica?
Una sesión de terapia psicológica suele durar alrededor de 50 minutos, aunque esto puede variar dependiendo del terapeuta y del tipo de terapia que se esté llevando a cabo. Durante esta sesión psicológica, el terapeuta escucha al paciente, le ayuda a identificar sus problemas y le proporciona herramientas para abordarlos.
En una sesión de terapia psicológica, el paciente debe sentirse cómodo para hablar de cualquier cosa que le preocupe. Desde problemas emocionales hasta relaciones interpersonales o problemas laborales. El terapeuta proporciona un espacio seguro y confidencial donde el paciente puede hablar libremente, sin temor a ser juzgado o criticado.
¿Cuánto dura una terapia psicológica en sí?
La duración de la terapia psicológica varía según el paciente y su problema específico. En Jokabide, trabajamos con terapia breve, lo que significa que la duración estimada de la terapia es de entre 15 y 20 sesiones. Sin embargo, es importante tener en cuenta que cada paciente es único y que su proceso terapéutico puede durar más o menos tiempo, dependiendo de su progreso y su adherencia al tratamiento.
Es importante mencionar que los pacientes pueden abandonar la terapia psicológica en cualquier momento. Aunque es recomendable que lo hagan de manera consensuada con su terapeuta. El terapeuta puede ayudar al paciente a explorar sus motivos, y trabajar en cualquier problema que pueda estar impidiendo su progreso.
¿Qué sucede en una sesión de terapia psicológica?
En una sesión psicológica, el terapeuta y el paciente trabajan juntos para identificar los problemas del paciente y encontrar formas de abordarlos. Durante la sesión, el paciente puede hablar libremente sobre sus sentimientos, pensamientos y experiencias, mientras que el terapeuta escucha atentamente y le proporciona orientación y apoyo.
El terapeuta puede utilizar diferentes técnicas y enfoques para ayudar al paciente a abordar sus problemas, como la terapia cognitivo-conductual, la terapia humanista o la terapia psicodinámica. También puede proporcionar herramientas prácticas para ayudar al paciente a manejar su ansiedad, estrés o depresión.
¿Qué ocurre al final de la terapia psicológica?
Cuando el terapeuta y el paciente deciden que la terapia está llegando a su fin, el terapeuta comenzará a espaciar las sesiones para verificar que los progresos perduren a largo plazo y prever eventuales obstáculos y desafíos venideros. Una vez que el terapeuta comprueba que el paciente se ha mantenido estable, se procede a terminar el proceso con una sesión psicológica de despedida.
En esta sesión de despedida, el terapeuta y el paciente repasan todo el trabajo que se ha realizado durante las sesiones. Y se enfatizan las herramientas que el paciente ha adquirido para resolver sus problemáticas sin la ayuda del terapeuta en el futuro. Además, el terapeuta apuntala las mejorías obtenidas y asegura que el paciente se siente preparado para enfrentar cualquier dificultad que pueda surgir.
Es importante destacar que, aunque la terapia y sesión psicológica puede ser efectiva, no existe una solución mágica para todos los problemas emocionales o psicológicos. La terapia requiere tiempo, esfuerzo y compromiso por parte del paciente, y puede ser un proceso desafiante en algunos momentos. Sin embargo, con la ayuda de un terapeuta capacitado y dedicado, el paciente puede encontrar una manera de abordar sus problemas y mejorar su bienestar emocional y psicológico a largo plazo.