Vivimos en una sociedad con un ritmo de vida vertiginoso, en la que nuestro entorno cambia rápida y constantemente. El aprendizaje de materias como la inteligencia emocional, el reconocimiento y prevención del acoso escolar o el buen uso de las nuevas tecnologías puede resultar desafíos difíciles de afrontar, bosques espesos en los que es muy fácil perderse.
De ahí la importancia de un guía, un profesional que nos oriente, acompañe y ofrezca la información de una forma estructurada, clara y amena.